¿Recuerdas estos dulces de tu infancia?

Los dulces de nuestra infancia. Seguro recordamos aquellos buenos días en que íbamos a la escuela tan pronto como suena la campana. Corríamos a la tiendita o al puesto más cercano contando nuestros centavos (sí, centavos) y nos comprábamos varios caprichos. Dulces azucarados, picantes, agridulces, ácidos y de todos colores y formas delinearon aquella etapa.

 

Los dulces mexicanos retro a menudo no saben tan bien como recordamos. Sin embargo, al estar envueltos en recuerdos y nostalgia hacen que los deseemos de vuelta. Si nos transportamos a nuestra niñez seguro que tendrán ese sabor que tanto nos encantaba. Pero ¿cuáles son estos dulces?

 

Miguelito

 

Un polvo que es el resultado de la mezcla de azúcar, chile y sal. Este se usaba como condimento con las frutas o simplemente lo ponías en tu mano. Probablemente uno de los dulces mexicanos más conocidos en Estados Unidos. Debido a la mala publicidad que se le dio cuando en un cargamento se encontró trazos de plomo en él.

 

Selz Soda

Unos dulces pequeños de caramelo sabor limón que en el interior tienen un polvo blanco a base de bicarbonato. Al contacto con la saliva crea una pequeña reacción efervescente. Tal vez no era el dulce más delicioso, pero el efecto en la boca era adictivo.

 

Cachetadas

 

Dulces típicos mexicanos, originarios de Jalisco. Consiste en una capa de caramelo de color brillante puesta entre dos pedazos de plástico. En sí es una paleta, pero cada quien la hace a su manera. Seguro tus amigos trataban de convencerte de que su forma de armar la paleta era la mejor, pero al final eras tú quien decidía.

 

Crayones

 

Replica de un crayón, son un mecanismo giratorio en su base que sirve para sacar, por la punta del crayón, una pasta de caramelo. Existen muchos sabores frutales. Lo divertido de estos dulces era que una vez que ya no se podía sacar de manera fácil abrías el crayón y con el dedo extraías lo que quedaba.

 

Chupa-chups

 

Es una empresa española que se especializo en la elaboración de paletas confitadas. Estas vienen en muchos colores y tamaños. Pero siempre guardando una tendencia: sabores suaves y originales, colores llamativos, pero no irritantes y envoltura simple.

 

Chicles motita

 

Goma de mascar en forma de tubito que tenían una especie de tigre en la envoltura. Los mejores sabores eran plátano y tutti-frutti.

 

Fuente: Sapere Aude