El uniforme escolar han estado pasando por el escrutinio de la modernidad. Así como muchos otros elementos educativos. Es decir, empezamos a cuestionar muchas cosas que antes tomábamos como normales o cotidianas. Una de estas es el uso del uniforme escolar, ¿tiene realmente utilidad?
Las escuelas hoy
Primero, somos consciente de que algunos de nuestros sistemas de escuelas públicas se encuentran en un estado precario. La violencia, la mala asistencia y las actitudes desalentadoras se interponen en el camino de la educación de hoy.
Se necesitan cambios radicales para devolver nuestros estándares educativos a niveles competitivos en todo el mundo. Nuestras escuelas deberían volver a ser los refugios seguros. Centros comunitarios para la educación y el desarrollo de los estudiantes. Ellos necesitan la autoestima, el propósito, la esperanza y la seguridad asociados con crecer en un ambiente de aprendizaje saludable.
¿En qué ayuda el uniforme escolar?
La implementación de un programa de uniformes escolares puede ayudar a satisfacer estas necesidades. Las razones son claras y diversas. Ha habido un aumento dramático en la extravagancia de la vestimenta diaria de los estudiantes.
Existe una fuerte competencia para vestirse “bien” y la presión de los compañeros para realizar y conformarse es increíble. Mientras que cuando una escuela recurre a los uniformes obligatorios, todo lo anterior se vuelve discutible. Todos los estudiantes se ven iguales, a un nivel base. La concentración vuelve a ser quién eres, en lugar de lo que llevas puesto o lo que puedes pagar.
Es así como los estudiantes están menos inmersos en mantenerse al día con las tendencias de hoy. La atención de los estudiantes debe regresar al aprendizaje en el aula, en lugar de cómo se ven cuando están en ese aula. Los uniformes obligatorios pueden servir para cambiar el énfasis de la competencia al rendimiento académico y el logro personal.
Fuente: French toast