Una obsesión es un patrón de pensamientos o ideas recurrentes y persistentes que causan ansiedad y malestar significativo. Estas ideas o pensamientos suelen ser irracionales, intrusivos y difíciles de controlar.
Algunos de los factores que causan una obsesión son los traumas, el abandono, el abuso físico o emocional, el descuido, la falta de afecto o la baja autoestima. Estos pueden conducir a la persona a desarrollar los siguientes de comportamientos, ansiedad, dolor intenso, angustia, preocupación y desasosiego.
También puede llegar a consumir la vida cotidiana de una persona, interrumpiendo sus relaciones, su trabajo y su bienestar general. Es importante abordar y tratar las obsesiones para recuperar la calidad de vida y el equilibrio emocional.
Esta se puede trabajar mediante los siguientes tipos de Terapia:
- Terapia cognitivo-conductual
Esta terapia es de enfoque más efectivo para tratar las obsesiones. Se centra en identificar y cambiar los patrones de pensamiento y comportamiento que mantienen la obsesión.
- Terapia de exposición
Esta terapia tratar una variedad de afecciones, que incluyen ansiedad, fobias y trastornos alimentario. Consiste en exponer al paciente directamente al objeto, situación o actividad que produce ansiedad.
- Terapia de aceptación
Esta es una terapia de tercera generación de marco relacional. La cual se basa en la aceptación y compromiso y cómo este se aprende a través de la interacción con el entorno. Esta esta orientada a la aceptación psicológica y a los valores personales.
- Terapia de reestructuración cognitiva.
Esta terapia se encarga de corregir los pensamientos distorsionados, a partir del análisis de los cambios emocionales o de conducta de cada persona, ayudando a disminuir la ansiedad, el miedo o el malestar.
Es crucial buscar ayuda profesional y utilizar diferentes técnicas y estrategias para manejar y tratar las obsesiones. Recuerda que no estás solo y que hay recursos disponibles para ti. Siempre busca apoyo y recuerda que hay esperanza y posibilidades de mejora.