Lenguaje corporal: Los brazos cruzados

A la hora de comunicarnos el lenguaje corporal es muy importante. Forma parte de la comunicación no verbal y podemos expresar mucho de lo que nuestro inconsciente está pasando por ese momento.

 

Nuestras posturas, gestos y movimientos transmiten mensajes e indican el estado emocional del emisor del mensaje. De acuerdo a estos mensajes, el receptor puede identificar si el mensaje es de confianza o no.

 

Una de las posturas más polémicas y a la que los especialistas en lenguaje corporal le han puesto particular atención es a la de los brazos cruzados. Una postura común pero que esconde muchos significados.

 

 

¿A qué se asocia la postura de brazos cruzados?

 

Desde que somos muy pequeños, utilizamos nuestros brazos para protegernos de cualquier peligro. Los bebés, por ejemplo, se esconden detrás de objetos cuando se sienten amenazados. Esta costumbre de ocultarse ante una situación amenazante evoluciona para utilizar los brazos como barrera ante posibles peligros.

 

Conforme crecemos y vamos siendo conscientes de nuestro lenguaje corporal, utilizamos este mensaje para transmitir bloqueo ante posibles amenazas. Cuando uno adopta la postura de brazos cruzados intenta protegerse de cualquier agente físico o psicológico amenazante.

 

Por lo tanto, cuando se habla con una persona que adopta esta postura es probable que se sienta amenazada. Si a esto se le suma una actitud nerviosa, negativa y a la defensiva es seguro que está incómoda y se siente amenazada.

 

Sin embargo, muchas personas afirman que esta postura los hace sentir más bien cómodos. Esto podría ser por la seguridad que garantiza esta postura, especialmente para las personas tímidas. Se sienten mucho más cómodas de brazos cruzados porque les hace sentir seguridad ante cualquier factor ambiental.

 

Científicos afirman que al encontrarnos en un entorno confiable, positivo y alegre, esta postura resulta incómoda. Ya que no hay nada de qué protegerse.

 

 

Formas de disimular esta postura

 

Ya que varios estudios se han centrado en esta postura, es muy evidente el mensaje que las personas que lo adoptan están proyectando.  En algunas profesiones, especialmente las que involucran tener una imagen pública las inseguridades no pueden reflejarse.

 

Muchos actores, políticos o modelos utilizan esa misma postura pero camuflada para no hacer notar que se sienten amenazados. Cruzar las piernas, desplazar un brazo para tocar el otro o tocar algún objeto de forma circular con ambos brazos da la misma sensación de seguridad. En el caso de las mujeres, el uso de bolsos grandes las ayuda a adoptar esta postura sin que se note demasiado.

 

¿Eres consciente de las posturas que tomas?

Fuente: Divulgación dinámica