Fontana di Trevi

Fontana de Trevi es la fuente más bonita de Roma, con unas dimensiones de 20 metros de anchura por 26 metros de altura, la Fontana de Trevi es también la fuente más grande de la ciudad.

Los orígenes de la fuente se remontan al año 19 a.C., época en que la Fontana constituía el final del acueducto Aqua Virgo. La primera fuente fue construida durante el Renacimiento, bajo las órdenes del papa Nicolás V.

Cuenta una leyenda, que en aquellos tiempos una misteriosa doncella fue la que le indicó a su amigo íntimo el general Agripa, el lugar donde se encontraba el manantial que la nutriría de agua desde las afueras de Roma.

Por este motivo, para traer el agua a Roma el general Agripa construyó un acueducto, bautizado como Aqua Virgo, en honor a la virgen doncella, y que medía 22 kilómetros de largo, hasta una pequeña pila en la que los habitantes podían abastecerse de este preciado líquido.

Este acueducto estuvo en funcionamiento durante más de 400 años hasta que fue destruido en algunas de sus partes por los Godos y por lo tanto ya no pudo cumplir su función.

Sin embargo, la fuente no empezó a tener este aspecto hasta la época del Renacimiento, cuando en el siglo XVIII un hombre llamado Nicola Salvi, sorprendió a todos con este asombroso diseño.

Y al igual que ocurre con los autores de muchos monumentos realizados aquí en la Ciudad Eterna, Salvi, quien construyó la Fontana di Trevi, murió sin ver terminada su hermosa obra, ya que los trabajos de su construcción, se prolongaron durante 30 años.

Por este motivo, Giovanni Pannini fue quien se encargó de terminar oficialmente la fuente en 1762, y quien sustituyó las suaves alegorías que habían por unas más sencillas de Agripa y Trivia, una diosa romana.

Una de las características destacadas de la Fontana di Trevi es el contraste entre la monumentalidad de la fuente y la pequeñez de la plaza en que se encuentra: tan escondida entre callejuelas que cuesta trabajo encontrarla. 

Fontana di Trevi: leyenda

  • Si arrojas una moneda: volverás a Roma.
  • Si arrojas dos monedas: encontrarás el amor con una atractiva italiana (o italiano).
  • Si arrojas tres monedas: te casarás con la persona que conociste.

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